皇居東御苑

Mucha paz y tranquilidad puedes disfrutar en estos hermosos y muy bien cuidados jardines, la caminata con el clima otoñal el deliciosa y puedes aprender un poco de la historia de estos jardines y obviamente del castillo principal, al cual no pudimos ingresar porque estaba cerrado. Hay una requisa policial al ingreso en caso de que lleves morral.

Precioso lugar para desconectar del caos de la urbe y conectar con la  naturaleza. No te dejará indiferente.

Fuimos un día lluvioso de febrero de este año (2019), después de haberlo intentado infructuosamente el año pasado, y finalmente lo encontramos abierto :D
Visitamos el museo de la entrada, que transmite toda la formalidad de los emperadores japoneses, y luego recorrimos el jardín y las ruinas del castillo al interior. Quizás sea por la lluvia, pero lo que mas me impresionó fueron los colores y formas de las piedras en una zona del muro (en las fotos), además claro del color de los árboles bajo la lluvia, y el jardín de cítricos de todos tipos que estaban con todos sus frutos. Algunas flores ya estaban adelantando la primavera, y se veían hermosas. Fue bueno encontrar un lugar donde refugiarse de la lluvia un momento.

Un lugar bastante agradable en donde se pueden ver los restos de una fortaleza durante la época del shogunato Edo. Ahora convertidos en jardines es un lugar para pasear sin nada realmente interesante que ver en verano. Toma como entre 1 y 1.5 horas el recorrerlo sin mucha prisa tomando fotos pero sin detenerse en cada detalle.

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